La vigésima quinta edición del Diplomado de Liderazgo Ignaciano Universitario Latinoamericano (PLIUL) en el Instituto Especializado de Estudios Superiores Loyola (IEESL) concluyó, el pasado sábado 20 de abril, con la entrega del certificado de participación a más de treinta estudiantes de esta casa de altos estudios.
El señor Antonio Ramírez (Wilkins), coordinador y docente del PLIUL, valoró la importancia de este proyecto en la vida de los alumnos, ya que les sensibiliza más como personas y les abre una mirada crítico-constructiva sobre la sociedad actual.
De su lado, Miguel Navarrete Tovar, coordinador internacional del PLIUL, exhortó a los graduandos a convertirse en agentes de cambio en sus comunidades y los ambientes donde se mueven, promoviendo el cuidado de la naturaleza, la reducción de la brecha social y la solidaridad mutua.
Las palabras de agradecimiento en nombre de los estudiantes estuvieron a cargo de Lisbeth Paniagua Poché, que dio las gracias a los docentes por su empeño y acompañamiento en el proceso formativo.
Pedro Llano, administrador del Colegio Loyola, al momento de encomendar la actividad al creador aprovechó también para invitar a los formados en el PLIUL a buscar en cada una de sus acciones el rostro de Dios.
El PLIUL se propone la formación de líderes ignacianos conscientes de los elementos fundamentales de su identidad, que reconocen sus potencialidades a desarrollar y aspectos que necesitan ser atendidos. Asimismo, conocen elementos del liderazgo con enfoque ignaciano mediante el manejo de conceptos sobre temas sociopolítico-ambientales.
Este diplomado es impartido por casi una veintena de universidades latinoamericanas confiadas a la Compañía de Jesús, que a su vez forman la AUSJAL.
